El Teatro Massimo Bellini es otra pieza importe del patrimonio arquitectónico de Catania. Construido sobre el proyecto del arquitecto milanés Carlo Sada fue inaugurado en 1890.
Por su escenario ha visto pasar a los mejores cantantes de ópera del siglo XX, desde Gino Marinuzzi a Vittorio Gui, desde Antonio Guarnieri a Georg Solti, Lorin Maazel, Riccardo Muti, Giuseppe Sinopoli, Alain Lombard; desde Toti Dal Monte a Callas, Caballé, Scotto, Freni; desde Schipa a Gigli, a Corelli a Pavarotti a Pertile a Del Monaco a Di Stefano; desde Galeffi a Bechi, a Gobbi, a Nucci, y se han representado en la práctica todas las obras maestras de la música clásica.
Il “Bellini” dispone de una orquesta de 105 componentes, de un coro de 84 intérpretes y de un nutrido grupo de técnicos de atrezzo. En su sala de mil doscientos asientos se desarrolla cada año una estación de ópera con siete turnos de abono y una estación sinfónica y una de cámara cons dos turnos de abono.
Poseedor de una gran acústica, el diseño del Teatro Massimo Vincenzo Bellini tiene influencias del estilo Segundo Imperio impuesto por Charles Garnier, arquitecto de la Opera de París y del Casino de Monte Carlo. Su inauguración en 1890, escenificó la legendaria obra de Vincenzo Bellini, Norma.