Desgraciadamente no podemos decir que Mesina sea un punto de referencia turística de Sicilia. Ensombrecida por la belleza de las otras capitales de provincia siciliana, y por la ruinosa estela que han dejado los sucesivos terremotos en el casco histórico de la ciudad. Sin ir más lejos, el 28 de diciembre de 1908 80.000 mesineses murieron en el terremoto y los posteriores tsunamis que destruyeron la ciudad y obligaron a reedificar la ciudad. Posteriormente, durante el bombardeo de los aliados durante la segunda guerra mundial, la mayoría de los edificios fueron seriamente dañados.
Actualmente trata de resurgir a base del tesón de la comunidad de Mesina por restaurar su patrimonio histórico y urbanístico.
Probablemente la ciudad es más conocida por su estrecho y por el onírico puente de Mesina del que tantas veces se ha hablado sin que se haya concretado su consecución. Incluso la aprobación del proyecto que finalmente se había aprobado en el Parlamento italiano ha sido recientemente paralizado.
¿Qué ver en Messina?
Si hacemos parada en Mesina nos dejaremos de visitar la catedral y su hermosa torre de Reloj, o el Museo Regional que alberga además deun extenso número de pinturas los cinco paneles de la Madonna con los Santos Gregorio y Benito, obra del famoso Antonello de Messina,el pintor más importante del Renacimiento Siciliano, además de dos cuadros de Caravaggio,encargados por la ciudad en 1609.
Más allá de los yacimientos, monumentos o joyas de Sicilia Mesina también forma parte de la isla, y esta no sería igual sin ella.